(130) Mi deuda

Nunca podré perdonar a los hombres y mujeres que me mostraron una sociedad en la que se daba por hecho privilegios para los hombres por el mero hecho de serlo. Si eres hombre como yo, pueden pasar muchos años sin percatarte de nada, o peor aún puedes ser consciente y consentir egoístamente con un estatus que sabes que no es justo pero que te conviene. Ahora las cosas han cambiado al menos en teoría, pero aún falta mucho para que nos enteremos por fin de que el privilegio que hombres y mujeres tenemos y compartimos, es el de ser personas . Tendríamos que devolver ahora tantos años de esfuerzos, amarguras, sufrimientos, injusticias. ¿A qué esperamos para saldar nuestra deuda?