La vida es un ciclo que no se puede evitar.
Nacemos sabiendo que un día, más o menos lejano, tenemos que morir. En ese tiempo intentaremos dejar nuestra huella en la vida o pasar totalmente desapercibidos.
Algunos sabrán cómo hacerlo, o querrían, simplemente por el hecho de ser recordados. De ahí el afán de muchos hombres de construir sus grandes imperios. Pero, ¿qué imperio es más bonito y grandioso que el hecho de dar vida?
Eso es lo más bonito de ser mujer. Que tan solo por el hecho de serlo puedas dejar tu mejor huella. Una nueva vida que crece dentro de ti y que de alguna forma te hará sentir orgullosa por ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario